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El futuro del trabajo remoto

Trabajar desde la casa, trabajar desde el tren, en el carro, trabajar de viaje, trabajar a diferentes horas según el tipo de tarea a entregar, en fin, trabajar desde cualquier lugar que no sea la oficina donde se encuentra el resto del equipo de trabajo o las instalaciones de la compañía. Esta modalidad de trabajo ha sido durante mucho tiempo el sueño de personas que han visto que, al trabajar así, pueden gestionar mejor su tiempo y hacer que les rinda más, ser más productivos y tener más disponibilidad para actividades educativas o de ocio constructivo. En este momento, ¿cuál es entonces el futuro del trabajo remoto?

Lo que era para muchos solo una idea, y solo una realidad de pocos, se convirtió, con la pandemia de 2020, en una modalidad común de trabajo: las cuarentenas preventivas obligaron a que las compañías siguieran con sus actividades, pero manteniendo a sus trabajadores en casa. Así, se implementaron soluciones y se buscaron las mejores alternativas para el desarrollo remoto de la operación, con todas las ventajas y las desventajas que esto significa.

Hoy, casi dos años después del inicio de la pandemia, con procesos de regreso a la normalidad en marcha, muchas son las organizaciones que quieren mantener el trabajo remoto en su futro próximo y lejano:

Mientras que algunas empresas siguen haciendo oídos sordos a la Gran Dimisión e insisten en que los empleados vuelvan a la oficina, los científicos de datos de Ladders insisten en que la escritura está en la pared. El trabajo a distancia ha llegado para quedarse. Según sus proyecciones, el 25% de todos los trabajos profesionales en Norteamérica serán remotos a finales de 2022, y las oportunidades remotas seguirán aumentando hasta 2023. (forbes.com)

La razón es que han descubierto que con esta forma de trabajo hay mayor satisfacción, tanto para el trabajador como para la organización, pues el empleado ahorra tiempo de traslados a la oficina y puede compartir más y mejor con su familia, mientras que la organización recibe mejores rendimientos del parte del equipo y también ahorra dinero que tendría que invertir en infraestructura de oficina para las actividades.

Lo que se ve en el panorama del trabajo remoto

A largo plazo, luchar contra el cambio puede hacer más daño que bien. Muchos empleados esperan ahora oportunidades de trabajo a distancia. Según Buffer, el 99% de los actuales trabajadores remotos querrían trabajar a distancia, al menos parte del tiempo, durante el resto de su carrera. Esto supone nueve puntos más que la cifra de la misma encuesta del año anterior. Además, según Global Workplace Analytics, el 37% de los empleados remotos aceptarían un recorte salarial del 10% para seguir trabajando desde casa. (businessnewsdaily.com)

Independientemente del sector en el que se desenvuelva la organización, es claro que lo mejor que pueden hacer las compañías es abrazar el trabajo remoto y pensar en las mejores maneras de implementarlo o de fortalecerlo si ya está en marcha. Con esto no solo les darán satisfacción a sus empleados, sino que estarán al ritmo de los negocios del siglo XXI, que se mueven con la velocidad de la tecnología y a partir de la movilidad de los dispositivos inteligentes que podemos llevar con nosotros a todas partes.

Y si los trabajadores esperan seguir trabajando remotamente en el futuro, y las compañías siguen mejorando las condiciones para lograrlo, entonces el impacto que se verá a nivel social será también significativo. Mark Cenedella, CEO de Ladder, “prevé que el aumento del trabajo a distancia supondrá un enorme cambio en la sociedad y afectará a todo el mundo. Liberará a los empleados de estar atados a una gran ciudad, por lo que Cenedella espera que sigamos viendo crecer ciudades y pueblos más pequeños. Las ciudades que tienen elementos de estilo de vida atractivos, pero que históricamente carecen de acceso a grandes empleos profesionales, experimentarán un crecimiento significativo” (forbes.com).

Si esta transformación en las condiciones de trabajo es tan importante como para cambiar la demografía, significa que estamos ante un hecho de fondo, estructural, que no depende de la voluntad de algunos directivos que no quieren cambiar su manera tradicional de organizar el negocio, sino que es un cambio global imposible de ser detenido.

Entre abril y septiembre de 2021, más de 24 millones de trabajadores estadounidenses abandonaron sus puestos de trabajo, según la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. A medida que entramos en el nuevo año, el Índice de Lugar de Trabajo Humano de Workhuman de enero de 2022 insiste en que las decisiones que tomen los empleadores serán fundamentales para su equipo, y el 81,5% de los trabajadores se sienten más capacitados para hacer que sus líderes sean responsables de un mejor lugar de trabajo en 2022. Más de la mitad (56%) dijo que sólo esperaría de 30 a 60 días para que los empleadores hicieran los cambios necesarios antes de considerar su salida. (forbes.com)

Para afrontar este enorme cambio que sigue su marcha imparable, lo que se recomienda es que las organizaciones aceleren también sus procesos de automatización de procesos: una operación altamente automatizada garantiza que el trabajo remoto pueda desarrollarse fácilmente y que la coordinación entre los miembros del equipo de trabajo sea óptima, además, se seguirá generando valor a la organización al llenar las expectativas de los clientes de la organización.

En Dexon Software hemos visto que nuestros clientes, al automatizar sus procesos, pierden también el miedo al trabajo remoto y obtienen mejores resultados con sus equipos de trabajo.

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