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Transformación digital y ciberseguridad

La transformación digital consiste en llevar un negocio que funciona basado en estructuras manuales y mecánicas, a que funcione en estructuras digitales, mediante plataformas de tecnología informática. Con esto, la compañía puede aprovechar todos los beneficios del internet y de la conexión inalámbrica de todos sus activos. El monitoreo se hace fácil y continuo, y la mejora permanente se sigue de esta dinámica.

En la actualidad esta transformación, parcial o total, es ya una necesidad, y no hay un negocio que no esté en vías de empezar este proceso de cambio hacia lo tecnológico. Para esto hay diferentes estrategias y recomendaciones, pero en general, con el conocimiento que se ha desarrollado, ya no es un proceso difícil.

En el pasado, el ciclo de adopción de tecnología era un proceso lineal de recopilación de requisitos, desarrollo de soluciones, pruebas y formación del usuario final. Este proceso solía dar lugar a bajos índices de adopción y, en última instancia, a un escaso valor empresarial. Las transformaciones digitales siguen un proceso mucho más iterativo de diseño, creación de prototipos, recopilación de comentarios y mejora de la solución para que pueda capturar todo el potencial de valor. (mckinsey.com)

Sin embargo, hay algunos riesgos asociados con la transformación que usualmente no son tenidos en cuenta. Cuando se empieza con estos procesos, los gerentes suelen estar completamente enfocados en los beneficios y las ganancias, por lo que olvidan la importancia de la seguridad digital, necesaria en un entorno con más y más avances tecnológicos, disponibles no solo para los negocios, sino también para los hackers y las personas deshonestas.

En la prisa de muchas organizaciones por digitalizarse -especialmente cuando respondieron rápidamente a una crisis mundial en cuestión de semanas- a menudo se han saltado un paso crucial en el proceso: la ciberseguridad. La transformación digital fiable y resistente sólo puede lograrse cuando tiene una base de ciberseguridad por debajo. Al eludir la ciberseguridad en su prisa por digitalizarse, las organizaciones, sus empleados y sus clientes quedan expuestos. (forbes.com)

Ciberseguridad por medio de la automatización completa

La característica más importante de la transformación digital es la cantidad de información que deja disponible en los canales informáticos de la organización y de la nube, que no necesariamente se encuentra en sus propios servidores. Todos estos datos deben tener su propia estrategia de protección, porque de otro modo quedan vulnerables para todo tipo de robos o fugas.

Normalmente, la transformación digital se divide en cuatro categorías -dominio, proceso, modelo de negocio y organizativo/cultural- y genera de forma natural un maremágnum de datos y conexiones. Aunque este caudal de información ofrece nuevas oportunidades de innovación y optimización, también hace que las organizaciones sean vulnerables a las filtraciones de datos y las ciberamenazas. Esto significa que las empresas a menudo gastan millones de dólares en digitalizar sus procesos sólo para arriesgarse a una violación de datos que puede costar 5,72 millones de dólares de media. (forbes.com)

Por esto es necesario hacer uso de una herramienta de digitalización que sea flexible y permita integrar todo tipo de herramientas de seguridad. Además, debe tener un uso sencillo y práctico para que los líderes de este proceso de protección de datos puedan llegar a tener una visión completa de los circuitos de la información y de esta manera detectar dónde puede haber riesgos de fuga de datos.

Esto permite que este líder de ciberseguridad pueda estar acompañando permanentemente el proceso de transformación digital para reducir todos los riesgos:

Es fundamental que estén profundamente involucrados en el proceso de transformación digital de principio a fin. Al incorporar a un experto cuyo único objetivo sea la protección de datos, las organizaciones pueden garantizar que la ciberseguridad no se convierta en una partida más del proceso de digitalización, sino en una prioridad absoluta. (forbes.com)

Esto no es solo una forma de darle calidad a los procesos, sino que les da a los clientes una confianza en la organización a la que han decidido dar su información.

En estos puntos finales pueden implantarse soluciones avanzadas de supervisión, como la gestión convergente de eventos e información de seguridad (SIEM) y el análisis del comportamiento de usuarios y entidades (UEBA), para reforzar la protección y garantizar que la implantación digital se realice sin problemas. Durante este proceso de instalación, la comunicación abierta y continua es vital para garantizar que el proyecto se ajuste al calendario y cumpla los KPI acordados. (forbes.com)

La ciberseguridad siempre es uno de los focos más importantes de nuestro trabajo en Dexon Software: toda implementación que realizamos busca cubrir todo riesgo informático desde el diseño mismo de la solución para el negocio. Nuestra herramienta puede integrar todas las actividades de la compañía en un mismo sistema y no genera aislamiento de procesos. Por eso, podemos garantizar una cobertura de ciberseguridad sobre toda la información que viaje por nuestras plataformas.

Estamos convencidos de que la transformación digital es la manera de que los negocios alcancen sus máximos rendimientos. Con implementaciones responsables esto se puede lograr de manera rápida y segura, sin comprometer la información que los usuarios le confían a la organización, ni la información que la información guarda para acrecentar su competitividad y su valor comercial. 

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