Dexon BPM

Algunos conceptos relacionados con la gestión de procesos (BPM)

El manejo y la dirección de una organización se han vuelto cada vez más exigentes debido al aumento en la velocidad de las comunicaciones, que han generado la necesidad de tomar decisiones más rápidas con una cantidad mayor de información. El papel de la tecnología en las compañías de hoy ya no es el de una herramienta de apoyo, sino que se ha convertido en una parte estructural de los procesos. Por eso, diferentes enfoques buscan ofrecer una mirada holística que permita gestionar todos los procesos de manera integrada y confiable.

A esto precisamente se refiere el Business Process Management (BPM). Este es un método que pone los procesos de la organización como base para la estructura de todo el equipo. Es decir, que estimula diferentes formas de organizar la compañía según los procesos que esta necesite para cumplir con sus objetivos y darles satisfacción a sus clientes.

Software para BPM

Como enfoque general, el BPM ha ayudado a comprender mejor cómo hacer que las organizaciones sean más eficientes y rápidas. Pero esto ha dado un paso más y se ha alineado con la tecnología informática para producir herramientas de software que sirven para que la estructuración armónica de los procesos y los responsables de cada uno se puedan basar en un sistema de comunicación automatizado y completamente interconectado.

Los softwares de BPM son entonces herramientas tecnológicas que toman la estructura general de los procesos de una organización, automatizan las acciones repetitivas y envían constantemente alertas y recordatorios para que las personas encargadas de cada tarea actúen en el momento oportuno, sin interrumpir otros procesos y sin repetir inútilmente asuntos que ya han sido resueltos.

BPM se vuelve así un organizador central que mantiene todo funcionando al ritmo correcto, y completa y permanentemente conectado. Esto garantiza la realización de las actividades y que se cumplan los plazos establecidos y los compromisos con clientes y asociados. Además, como se usa una herramienta informática, todas las actividades quedan registradas y el historial de acciones puede revisarse en cualquier momento para generar una mejor continua real y efectiva. 

Gestión de procesos empresariales (Enterprise Process Management – EPM)

Si el BPM es el enfoque general para automatizar y centralizar los procesos en un flujo de trabajo central e integrado, el EPM es la manera concreta en que cada compañía utiliza este enfoque. Para lograrlo, primero se debe pasar por una etapa en la que se identifica claramente cuáles son las metas de la organización y cuáles las estrategias con las que va a conseguirlas. Después se revisan los recursos que se tienen y, con un conocimiento total del negocio, se pasa a la alineación de todo con los sistemas informáticos que van a automatizar los procesos.

Todo este esquema puede repetirse cuantas veces se necesite: para distintos proyectos, para diferentes aspectos de la organización, para renovaciones y cambios que pueden venir con las variaciones del mercado, etc. Lo esencial es mantener los principios de BPM: automatización, integración, prioridad de los procesos y mejora continua.

Como se ve, este aspecto requiere un conocimiento profundo de la organización, lo que está asociado con nuestro siguiente concepto: la arquitectura organizacional.

Arquitectura Empresarial (Organizational Architecture – OA)

Igual que cuando se construye un edificio se usan unos planos y unas estructuras que guían la construcción, cuando se hace una compañía se tienen unos parámetros claros de lo que se quiere construir y de cómo se va a lograr ese esquema. Si estas ideas guía se siguen adecuadamente, el resultado será el esperado, aun en medio de cambiantes entornos del mercado y las comunicaciones.

Además, cuando se necesita hacer alguna reparación en un edificio o una casa los planos son fundamentales. Solo hay que revisarlos para saber cuál es la mejor forma de reparar una tubería dañada, de cambiar una parte húmeda del piso o de quitar una pared para ampliar una habitación. De la misma forma, si la organización tiene unos planos iniciales y fue diseñada según unas estructuras claramente establecidas para lograr unas metas concretas, si se necesita hacer algún cambio, solo se deben revisar esos planos para saber cómo hacer las transformaciones precisas sin la necesidad de entorpecer toda la operación empresarial.

Con este tipo de diseños, además, resulta mucho más fácil llevar a cabo iniciativas de automatización de procesos, pues basta con usar las herramientas tecnológicas y alinearlas con lo que ya está en el diseño de la estructura corporativa.

Para sintetizar, podemos decir que el Business Process Management es el enfoque general de mejora y automatización de los procesos de un negocio y que, para que se concrete en una compañía en particular, se debe pasar a lo que se conoce como EPM, es decir, la revisión concreta de las necesidades de esa compañía, según sus recursos y sus metas, su visión y su misión. Y, para conseguir todo esto, es necesario conocer las estructuras precisas de la organización: su arquitectura, sus bases y conexiones entre partes del equipo, en definitiva, su plano general de funcionamiento.

En un entorno tan rápidamente cambiante como el de los negocios de hoy, cuando la tecnología y la comunicación inmediata son la base, es inevitable buscar maneras de mejorar la efectividad y la eficiencia de las organizaciones. La automatización y el claro diseño de las estructuras son las mejores estrategias para utilizar en esa dirección.

Post de interes

¿Para qué estandarizar procesos?

¿Para qué estandarizar procesos? Linkedin Youtube Facebook Instagram Queremos que nuestro negocio funcione sin tener que estar siempre controlando todo.

BPM y negocios sostenibles

BPM y negocios sostenibles Linkedin Youtube Facebook Instagram Desde hace ya un par de décadas se viene hablando de los

Compartir este post

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp